¡Hola! Mi nombre es Yeni y durante esta semana estaré compartiendo contigo una serie de recomendaciones, tips, entre otros trucos para hacer tu aventura por la preparatoria abierta en línea mucho más duradera. No importa si ya la iniciaste o apenas estás considerando optar por esta modalidad de estudio, me parece que todo lo que te contaré puede ser muy útil. Estudiar cualquier cosa a través de Internet puede convertirse en una experiencia fundamental e incluso de transformación de tus hábitos de vida. Lo digo porque yo misma me encuentro estudiando bajo esto formato, y me parece que puedo compartir todas las bondades de este tipo de aprendizaje.
El día de hoy quisiera hablarte de un tema que atañe a todos los estudiantes, no importa si son presenciales, a distancia, en un formato abierto, grandes, pequeños, hombres, mujeres, de licenciatura o preparatoria: todos, en algún momento nos hemos visto superados por las obligaciones de estudiantes y de la vida cotidiana, generando una atmósfera estresante que no sólo pueden apoderarse de nuestra concentración al momento de estudiar, sino, también, de la capacidad de realizar tranquilamente nuestras actividades. Sí, estoy hablando del estrés y la ansiedad.
¿Sabías que en algunas ciudades de Japón o de Estados Unidos, la tasa de suicidios entre jóvenes estudiantes aumenta en la temporada de exámenes? Hace poco, la actriz mexicana Karla Souza confesó durante una Ted Talk que sufrió una severa depresión mientras estudiaba en una de las escuelas de drama más prestigiosas de Inglaterra. El nivel de ansiedad era tal, que Karla estuvo varios meses sin poder hablar ni emitir ningún sonido e incluso llegó a considerar el suicidio. Fue gracias al apoyo incondicional de sus amigos y de la atención médica adecuada que salió adelante.
Una de las mayores razones por las que la presión estudiantil llega a puntos tan extremos es por una especie de normalización que las sociedades modernas han hecho del estrés y la depresión. En el caso de la primera, lo tomamos como algo muy normal que forma parte de nuestras vidas, y aunque nos causa conflictos, pareciera más fácil aprender a vivir con ella que combatirla. Para la segunda, hemos pervertido el término, pues en lugar de verlo como un padecimiento mental serio, lo relacionamos con otras emociones como el desgano o el cansancio. Lo usamos de manera tan indiscriminada que no se ha perdido por completo su sentido propio.
Si vivimos con el estrés como algo común en nuestras vidas, y el contexto de nuestra vida, actividades diarias y contratiempos se ven un poco rezagados durante una época, es muy probable que caigamos en un estado emocional que no sólo afecte nuestras ocupaciones, como el trabajo o la escuela, sino que podemos adquirir una enfermedad mental cuyo tratamiento puede extenderse por varios años.
Es importante entender una cosa: el estrés no tiene porque ser algo inherente a nuestras vidas, y en esta fase, siempre tenemos la responsabilidad y el control para no caer en las redes de la ansiedad. Quizás el primer paso para alejarse de estos padecimientos es tomar la responsabilidad total de nuestras vidas y tomar las medidas necesarias para tener buenos hábitos de organización. Por supuesto, nada de esto será fácil, pero todos tenemos la capacidad para lograrlo.
Cursar la preparatoria abierta en línea puede convertirse en un paso importante para comenzar a volvernos más responsables de cada una de nuestras acciones, pues en este formato de estudio, nadie más que tú tiene el control. El avance en el aprendizaje, la resolución pronta, evaluaciones, tiempo de estudio, todo ello es asumido por las decisiones que vayas tomando al ir organizando cada uno de los aspectos del curso.
Pero, ¿qué hago si de pronto he llegado a las evaluaciones finales? ¿Estoy a punto de presentar mi examen Ceneval y me siento un poco nervioso? ¿Acaso no es algo normal?
Veamos que hay una gran diferencia entre sentirse nervioso y estresado. En el primer caso, si cuentas con una serie de herramientas, el nervio puede desaparecer y justo comenzarás a sentir la seguridad necesaria para afrontar esa situación que te pone en tal estado. El segundo, crea una sensación de ansiedad física y corporal a tal grado que nulifica por completo cualquier capacidad para reaccionar y resolver el problema.
Insisto, esta es una situación que se puede hacer presente en cualquier persona y no significa necesariamente una señal de debilidad, pero nadie más que tú puede tomar las medidas necesarias para implementar estrategias que te alejen de estas situaciones complejas. A continuación te voy a enlistar una serie de recomendaciones, muy breves, mediante las cuales te diré cómo puedes prevenir el estrés y que esto no te afecte mientras te encuentres en la preparatoria abierta en línea. Incluso, si las pones en práctica de manera constante, va a servirte en cualquier aspecto de tu vida.
- Mantente hidratado. ¿Alguna vez has sentido un dolor de cabeza que viene de la nada mientras te encuentras repasando tus apuntes? Probablemente esto suceda porque no estás lo suficientemente hidratado. Por lo tanto, procura cumplir con los tres litros de rigor desde el momento que te levantas. Hay personas que pueden llegar a la mitad del día sin tomar un vaso de agua. Si tu cuerpo se encuentra lo suficientemente hidratado puede concentrarse mucho mejor y trabajar con fluidez. Mi rutina siempre comienza con un vaso de agua por la mañana y posteriormente el té que me apetezca ese día. Cuando siento sed, en lugar de jugo o refresco me sirvo un poco de agua. Las bebidas artificiales las dejo para la comida, la cena o cuando tomo un tentempié.
- Descansa lo suficiente. He visto a mis amigos enrolarse en jornadas extenuantes de trabajo con tal de terminar algo atrasado o repasar y repasar cada uno de los apuntes del semestre, haciendo ejercicios, leyendo cosas, resolviendo ejercicios, entre otras cosas. Dentro de estas jornadas suelen dormir muy poco o no dormir absolutamente nada. Craso error. Cuando tu cuerpo no descansa lo suficiente, las capacidades cognitivas no trabajan de la misma manera. El nivel de concentración y de comprensión se reducen considerablemente, así que te llevará el doble del tiempo resolver o entender conceptos y es probable que se te olviden rápidamente. Entonces, el supuesto esfuerzo no vale casi de nada, y esto me lleva al siguiente punto.
- Organiza tu trabajo. En la preparatoria tenía un maestro que nos decía que era una persona un poco desordenada, pero aún así contaba con una disciplina de trabajo que le permitía sacar adelante cada una de sus metas. A lo que él se refería es a la importancia de tener un plan básico para trabajar. Si desde el minuto uno de tus cursos en la preparatoria abierta en línea delineas muy bien en qué momento tomarás las sesiones, trabajo de investigación, resolución de evaluaciones y sesiones de estudio para los exámenes y además cumples en tiempo y forma con cada una de ellas, no habrá ninguna razón para que aparezca el estrés. Llegarás totalmente tranquilo y preparado a cualquier examen.
Espero que estos tres consejos tan sencillos pero valiosos, puedan hacer de tu experiencia como estudiante una actividad realmente disfrutable y enriquecedora. El aprendizaje no tiene por qué ser algo frustrante o pesado. Cuando eso sucede, realmente es mejor que consideres darte un tiempo y comenzar de nuevo. Te aseguro, entre más disfrutes tus cursos más vas a aprender.