Nadie puede negar que la educación nos ha ayudado desde tiempos muy remotos a desarrollar nuestras capacidades tanto físicas como mentales. Podría afirmarse sin ninguna contradicción que el hombre es producto de la educación, ¿por qué? porque nuestra especie está dada para enseñar y transmitir saberes que sean de utilidad en nuestro desarrollo evolutivo. Por otra vía sería imposible concebir a la humanidad, pues el acto de educar está grabado en lo más profundo de nuestro ser.
Imaginemos un mundo en el cual nuestra especie no concibiera ningún tipo de saberes tan complejos como los nuestros. Seguro no hubiésemos escalado tantos peldaños como lo hemos hecho hasta ahora. Cosas que antes eran consideradas imposibles hoy son asequibles y forman parte de nuestra realidad. Por tal motivo, es evidente que despreciar la educación o eludirla es equivalente a negar una amplia gama de posibilidades, por ejemplo, un futuro más pacífico y esplendoroso.
Estudiar y dedicar una parte de la vida al aprendizaje ayuda a la conformación de mejores sujetos, más preparados para los retos y misiones que impone el ritmo de nuestra cotidianeidad. La educación básica es menesterosa, pero muchos pasan por alto el nivel licenciatura debido a diversas afrentas y dificultades que van más allá de su voluntad. Sin embargo, nadie debe evitar la oportunidad de estudiar el nivel superior ya que a través de él se nos abren muchas más puertas que en niveles inferiores.
La vida académica cobra cada vez más peso en la vida de las personas. Una época cada vez más competitiva y avanzada exige individuos mejor preparados y aptos para desenvolverse en los diversos ámbitos de la sociedad. La mejor manera de adecuarse a las exigencias de nuestra actualidad, es dedicarle tiempo al estudio a través de instituciones especializadas en conformar profesionistas de alto nivel.
Antes de ingresar a la universidad, es necesario certificarse en una institución de nivel medio superior, es decir, un bachillerato. Estudiar en tal nivel educativo es una de las decisiones más importantes en la vida, pues a partir de este uno define su futuro como profesionista. Para algunos, es fácil cursar la prepa pues cuentan con todos los instrumentos necesarios para hacerlo, asimismo, están bajo condiciones propicias para estudiar sin ningún tipo de dificultad.
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Ahora bien, analicemos algunas de las diversas causas del rezago educativo entre los jóvenes. Ojalá todos contaran con los recursos suficientes para evitar que ninguno abandone el colegio, desgraciadamente esto no es así pues cientos de hombres y mujeres cada año interrumpen el bachillerato para conseguir trabajo y ayudar en la economía familiar. Pese a todas las medidas y políticas implementadas para inhibir estos casos, aún siguen siendo altas las cifras de personas que no han podido obtener su certificado de bachillerato para continuar con una licenciatura o ingeniería, debido a los problemas de naturaleza económica.
Otra causa de la informalidad educativa son los embarazos entre los menores. Muchos que se encuentran o se han encontrado en esta situación alarmante se han visto en la necesidad de dejar el colegio para dedicarle tiempo a la crianza de un infante. Estudiar en un sistema como el escolarizado exige mucho compromiso y tiempo, pero no todos disponen de ello. Otro factor que provoca la deserción en el público juvenil es el acoso escolar o bullying. Son varios los casos de estudiantes que debido a esto han hecho a un lado su vida académica, por miedo a seguir recibiendo agresiones por parte de personas abusivas.
Por fortuna existe una modalidad excelente y acorde a todos aquellos que hayan experimentado los hechos citados en el párrafo anterior. ¿A qué modalidad nos referimos? Al estudio del bachillerato o la licenciatura por medio del sistema abierto y online. ¿Por qué estudiar en este modelo de enseñanza? Simple, porque ha demostrado ser el método más eficaz para reducir los niveles de rezago en nuestro país.
Son miles los egresados que han podido certificarse en los niveles superior o medio superior gracias al programa de estudios que ofrecen las diversas instituciones educativas que operan con la modalidad abierta y en línea. Se trata sin duda de una forma revolucionaria, ya que ha transformado la manera en que ha sido concebida la educación durante siglos, a saber, por medio de la presencia física de un maestro y un alumno.
En este sistema se utilizan plataformas denominadas “aulas virtuales”, en las que el alumno ingresa de manera no presencial para recibir asesorías con la ayuda de un equipo de cómputo con acceso a internet. Es así como se imparten los cursos, según el ritmo singular de cada alumno y con flexibilidad, pues los estudiantes pueden elegir cualquier hora del día para estudiar.
Aprobar el examen ACREDITA-BACH es una alternativa para obtener el certificado de preparatoria y continuar así con la universidad, ya sea una ingeniería o una licenciatura. Si quieres continuar con tu vida académica, en ITEL te ofrecemos cursos para que concluyas el bachillerato en línea con comodidad y según tu ritmo de vida, asimismo, para que acredites el examen ACREDITA-BACH. Te garantizamos que en tan sólo 4 meses conseguirás tal meta para que ingreses a la universidad y asegures un buen futuro para ti. Visítanos en nuestro plantel o comunícate con nosotros por medio de nuestra página web. ¡Te estamos esperando para hacer tus sueños realidad!